Existen muchas formas de elaborar este bocado típicamente americano. En tierras americanas son amantes de barbacoas gigantes donde cocina la carne lentamente durante 10 o 12 o hasta 24 horas!! Es verdad que el resultado con este tipo de elaboraciones es impresionante, pero, sabemos que no siempre contamos ni con el material ni con el tiempo suficiente para este tipo de elaboraciones por eso hoy os traemos una forma de cocinar esta receta mucho más rápida y sencilla.
En esta elaboración lo más importante es él sazona y el tipo de carne, especias de calidad como el pimentón de la Vera Vega Cáceres y una buena carne de calidad harán que guardes esta receta entre tus favoritas.
Ingredientes
Espaldilla de cerdo (2kg)
Aceite
Sal
Pimentón de la Vera Vegacaceres
Pimienta en polvo
Ajo en polvo
Chile en polvo
Cebolla (2ud)
Un tercio de cerveza negra
Caldo de carne (1l)
Preparación
Lo primero que debemos hacer es hacer cortes por toda la carne para que el sabor al cocer penetre mucho más en su interior.
Posteriormente, marcaremos bien la carne por todos sus lados para sellarla, dorarla y darle sabor.
Una vez marcada, vamos con el sazonado. Cubrimos bien con todas las especias, crearemos una capa sobre la carne con la sal, el ajo en polvo, pimentón de la Vera Vega Cáceres dulce, chile en polvo y pimienta negra molida, este proceso lo haremos por ambas caras.
Una vez sazonada por completo, cortamos dos cebollas grandes y las ponemos en el fondo de nuestra olla a presión.
Colocamos nuestra espaldilla sobre la cebolla, añadimos un tercio de cerveza negra y añadimos medio litro de caldo de pollo o hasta cubrir la carne.
Una vez que hemos colocado todos nuestros ingredientes juntos ya solo nos quedara cerrar la olla y dejarla a fuego fuerte durante al menos 90 minutos.
Como veis es una receta supersencilla de realizar y que os llevara como máximo 2 horas de preparación.
El pulled pork es un tipo de elaboración superversátiles y que podéis usar en múltiples elaboraciones, podéis hacer burritos, utilizarla para pasta o bocadillos, usarla con patatas rellenas y un sinfín de elaboraciones. Además, es una carne fácil de conservar y que aguanta lo suficiente como para consumirla días después de su preparación.